Sin duda nos quedamos con el artesano, pero con esta pregunta lo que queremos es hacer reflexionar a los panaderos y consumidores sobre el momento actual que tristemente vive hoy en día el pan en muchos lugares de España.
Recientemente Eduardo Villar de Horno Arguiñano estuvo en Ribadesella, Asturias, y pudo confirmar que realmente es un verdadero paraíso natural y descubrió que también es un paraíso gastronómico, una cocina que ha evolucionado de la tradición a la modernidad sin perder sus señas de identidad, todo ello envuelto en la amabilidad y cariño de los asturianos, pero también se ha encontrado con algo menos agradable, la avalancha de panes congelados y productos industriales que se venden como “artesanos” y no lo son.
Desde aquí, animamos a panaderos y consumidores a que luchen por defender y conservar la artesanía de verdad.